1Corintios 15:55 ¿Dónde está, oh muerte, tu
aguijón? ¿Dónde, oh sepulcro, tu victoria?
Como algunos saben que viajamos esta semana
pasada a visitar a nuestros hermanos en Mercedes y a parientes en Corrientes,
todo en Argentina, nuestro viaje a Mercedes fue celestial por lo que pasamos allí
con todos los hermanos, pero luego vamos a Corrientes todo en auto con toda mi
familia y el jueves pasado de mañana cuando me levantaba en la casa de la
hermana de María, me entero una desagradable noticia que me entristeció en el
momento pero luego me trajo un gozo celestial. La tía de María llamada
Magdalena había pasado a la presencia del Señor. Tanto la tía Magdalena y su
hijo Fabio habían han aceptado a Cristo hace muchos años con la predicación de
mi esposa María, y hermanos, ella le considera sus hijos espirituales. Fabio el
hijo de Magdalena ya esta casado con Sandra una buena hermana en Cristo fiel
como Fabio y tienen dos hijos creyentes todos congregados y sirviendo en la
Iglesia Bíblica de Corrientes. Ya sabíamos que estaba enferma la tía Magdalena,
hacia unos meses atrás le visitamos, y yo pensaba que si pasaba esto de que
pase a la presencia del SEÑOR no íbamos
a estar en su sepelio, pero justo ese día que estamos en corrientes de miles de
días que no solemos estar, ese día si estábamos, eso no es casualidad es obra
del SEÑOR, pues pude llevar a mi familia
al sepelio y a la hermana de María, a mi Padre pude ir al lugar del entierro un
poquito lejos pero hermoso. Y lo maravilloso para mi fue haber podido predicar
en la capilla del lugar del entierro, ante la audiencia de unos cuantos
familiares de mi esposa María y de Fabio que es su primo. Por lo cual estoy
agradecido a Fabio y Sandra su esposa y primeramente al Señor quien arreglo
todo para que se predique el Evangelio a muchos parientes aun incrédulos.
Ese velorio fue un ambiente celestial, era
como una parte del cielo, se respiraba tristeza pero un gozo eterno que nos
llenaba el corazón. Fue una experiencia especial por los sentimientos
encontrados pero que lindo y maravilloso era saber que la tía Magdalena era una
creyente fiel de muchos años. Eso hacia que la paz que había en el ambiente de
seguro habrá impresionado y sido de testimonio a muchos. Además vinieron muchos
hermanos en Cristo ,otros pastores predicaron y en fin todo fue celestial por
lo cual a pesar de la tristeza doy gracias a Dios con todo mi corazón por ese día
que pasamos junto a nuestra familia hermanos y parientes y sobre todo con la
presencia de nuestro amoroso Padre celestial.
Además fue grande el testimonio que recibimos de nuestro hermano Fabio y
Sandra que mucho lucharon por el bienestar de su madre que partió a estar con
el Señor, y verle a Fabio y Sandra con esa fe reluciente en todo momento a
pesar del dolor fue para nosotros de gran testimonio, por ello le pedimos oración
por esta querida familia y hermanos en Cristo Fabio Sandra y sus Hijos Febe y
Miqueas. Que el Señor les conforte especialmente en estos días tan difícil y
agradecemos al Señor la fe y consolación que el les provee. Una experiencia temporalmente
amarga pero eternamente dulce es la partida de un justo a los brazos del todopoderoso
quien nos amo y nos lavo nuestros pecados con su sangre a quien sea la Gloria
por los siglos de los siglos. Amen. 1 Corintios 15:54-58
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